Ando
en sendas oscuras,
Lugares
cerrados y muertos,
Nado
en lúgubres lagunas,
Y
recojo frutos de vacíos huertos.
Nadie
está conmigo,
Camino
solo y desamparado,
Parezco
más bien un mendigo,
Al
que nunca han ayudado.
Futuro
incierto y decadente,
Vacío
de sueños y esperanza,
Atormentas
y torturas mi mente,
Quebrando
su fe y templanza.
Que
puedo decir más,
Si
nadie quiere oírme,
Si
no estoy donde tú estás,
Mejor
será dormirme.
