lunes, 12 de noviembre de 2012

XXXIV


Mi mente marchita escupe palabras de viento,
Relata cuentos encauzados en lunas negras,
Inmersas en un mar vacío e incierto,
Donde no existen ni los caídos ni las guerras.

Donde solo estás tu.
Un lugar alejado del que no se conoce nombre,
Donde el color del cielo parece negro y no azul,
Y mi cuerpo el de un niño y no el de un hombre.

Ese lugar esta cerca pero a la vez lejos,
Los caminos que me conducen al el,
Están tapados por miles de espejos,
Que me recuerdan lo que esconde mi piel.

Esconden un ser macabro y oscuro,
Un ente mas muerto que vivo,
Incapaz de tener sentimiento alguno,
Alguien que lo ha dado todo por perdido.

Alguien que no espera que lo comprendan,
Un ser, que aun siendo como es,
Cruzará esa angosta y fría senda,
Para poder volverte a ver,

Para acariciar tus labios y besarlos,
Para rozar tu piel con los míos,
Fotografiar tus te quieros y enmarcarlos,
En las paredes de ente ser vacío.

Poco me importa los que se quejan,
Los que me tratan como un asesino,
Romperé esos espejos que los reflejan.
Los apartaré de mi camino.

Los apartaré para tenerte cerca, a mi lado,
En ese lugar, frente a una hoguera.
Estaremos juntos, abrazados.
Mi corazón palpitará, y el tuyo a su vera.

By: Carlainne

jueves, 6 de septiembre de 2012

Una día mas, he escuchado los suspiros de una tierra agonizante que llora por ser rescatada de entre las garras de la desolación y el egoísmo.............  Estoy arto de ver como la gente va a su puñetera bola sin tener en cuenta a quienes pisotean a su paso.........  Quiero ver un país donde todo el mundo se ayude, no uno en el que unos pocos nos dejamos el cuello mientras otros pasan de todo.

No somos los reyes de nada, esto es de todos, y todos deberíamos acarrear con un poco de responsabilidad.

domingo, 2 de septiembre de 2012

No te he olvidado

Hace poco que yo sufrí,
La perdida de un ser amado,
Hace poco que yo viví,
Lo mas negro de mi pasado.

Perdí a una persona,
Que siempre había respetado,
Perdí a una persona,
Que me hizo feliz en el pasado.

Siempre fuiste al que mas quise,
Siempre fuiste mi ser mas amado,
Lamento haberte perdido,
Y no poder volver a tocar tu mano.

Perdóname si hice algo mal,
Perdóname si te falle en algo,
Nunca te quise defraudar,
Nuca quise verte llorando.

Te echo de menos,
Quiero tenerte denuedo a mi lado,
Quiero que vuelvas,
Quiero volver a verte, ser preciado.

Recuerdo cuando me contabas,
Los sucesos de tú dura y triste niñez,
Y recuerdo también que me encantaba,
Que me lo contaras una y otra vez.

Sigo recordando todo lo que hicimos,
Todo aquello que vivimos,
Cada segundo que compartimos,
Todos esos momentos queridos.

Por ello te escribo estos versos,
Gracias por haberme ayudado,
Desde aquí te manda besos,
Tu nieto, que no te ha olvidado.

(Poema escrito en recuerdo de mi abuelo, Francisco García Caparrós, fallecido el 1 de septiembre de 2008, te quise, te quiero y siempre te querré abuelo.)

martes, 28 de agosto de 2012

Recuerdos de una vida 2º Fragmento

Días mas tarde mientras paseaba por las calles para intentar despejarme y olvidarme de ella, vi a dos niños tirándole piedras a un pobre perro callejero, no se porque pero sentí la necesidad de protegerlo y me metí por medio para evitar que siguieran maltratando al pobre animal, al verlo tan solo, malherido, con cara de no haber probado bocado en varios días y tiritando me recordó a mi cuando era niño.
En ese momento una sensación de protegerlo me inundo el alma, lo recogí y lo cuide con el propósito de que se recuperara pronto, el se convertiría en algo que jamás había tenido, un amigo fiel y leal.
Pensé en ponerle el nombre de mi amada, pero avía dos problemas, que era macho y que ponerle su nombre seria humillante para el, así que decidí llamarlo por su raza, se llamaría Dogos, me quede pensando, como unos niños han podido tratar así a un perro tan grande y tan bonito, su color negro como el tizón con unas pequeñas marcas blancas en el lomo y unos ojos marrones como el tronco de un roble, un carácter amigable, lo mas normal es que tras ese trato que le habían dado era que me hubiera mordido, pero no lo hizo y por ello se gano mi cariño.
Días mas tarde mi nuevo amigo de cuatro patas se recupero y fuimos a dar un paseo juntos para que le diera un poco el aire, mientras paseábamos nos encontramos con un viejo conocido mío de cuando trabaja de cochero en la finca de un hombre muy importante de negocios, ese hombre llamado Mamadu fue el que me recomendó a su señor como cochero, su dueño le había despedido y ahora buscaba trabajo, yo le devolví el favor recomendándoselo como carguero de los barcos a mi superior.
Ese hombre, mas joven que yo me decía que le había echo el favor mas grande que nadie podía haberle echo ya que por ser negro muchos lo trataban como a un perro callejero y que en mas de una ocasión le habían golpeado simplemente por tener un color de piel diferente a los demás.

Días después, recibí una extraña carta citándome a las nueve de la noche en el quinto amarre de la bahía, en el puesto Nº 12. Cuando me dirigía hacia allí un extraño presentimiento paso por mi cabeza, cuando llegue me encontré con una persona que gracias a mi presentimiento esperaba la bellísima Mº Luisa Di’ banco me esperaba con la misma sonrisa tímida y coqueta que tenia cuando nos vimos hacia ya tiempo, cuando todavía nuestros caminos estaban juntos. Se acerco a mi y con voz tenue me dijo al oído- “Malieri, pongamos fin a esta agonía que llevamos al vivir el uno separado del otro, sin poder vernos, mi marido no me ama y apenas se preocupa por mi, por ese motivo es por el que e podido verte esta noche, el no me hace sentir lo mismo que tu me hacías sentir cuando me besabas, veámonos cada semana aquí en este lugar, que me respondes”. Su interesante invitación me hizo dudar, acepte, en ese momento le dije con una alegría inmensa, ya que volvería a estar junto a ella, todo lo que este tiempo no podía haberle dicho- “mi queridísima Mº luisa, eres tu quien me anima cuando estoy triste, eres tu quien me llenas de energía, eres tu quien me llena de confianza, eres tu ya que hace que tenga un motivo para vivir todos los días”. Durante meses nos estuvimos viendo, amándonos cada noche como su fuera la ultima, hasta el terrible día en el que ella quedo embarazada. Ella creyendo que seria de su marido y no le dio importancia alguna. Nueve meses más tarde ella dio a luz a dos precioso bebes, un varón y una mujer, pero para su desgracia ambos nacieron blanco, dos días mas tarde el musulmán al enterarse que había sido deshonrado agarro un cuchillo, y la hirió de muerte en el mismo vientre en el que había llevado a sus hijos, a mis hijos. El comerciante musulmán quiso deshacerse de los pequeños, pero su suegro, el señor Di’ banco le arrebato de las manos a los indefensos bebes antes de que el cumpliera su propósito, abandonarlos en una colina a su suerte. El apenado padre de Mº luisa lloraba sin consuelo alguno veía como la vida de su hija se apagaba y el no podía hacer nada para evitarlo, en el momento que me entere de su muerte, de la muerte de mi amada, mi corazón que había cicatrizado un poco, volvió a romperse esta vez definitivamente para no volver a cicatrizar jamás.
En su entierro no se oía nada, ni el viento, ni la melodía de las cigarras, ni el murmullo incesante de las hojas de los árboles, ni siquiera el canto hermoso de los pajarillos que revoloteaban entre las cortas y verdes ramas de los tristes y lúgubres cipreses.
Dentro de una elegante caja de roble se hallaba el cuerpo sin vida de mi amada, y mientras veía como descendía y al mismo tiempo intentaba consolar a su inconsolable padre pensaba en todas las noches que había pasado con ella y al mismo tiempo me sentía culpable de su muerte, mi corazón roto me decía que si yo hiciera rechazado su petición aquel día ella aun continuaría viva.
Días mas tarde el dueño de la naviera me llamo a su despacho, cuando entre una mirada de dolor inundaba sus ojos, me temía que me culpara del asesinato de su hija y pudiera denunciarme, me equivoque, con un gesto afable me dijo- “Perdóneme señor Malieri, perdóneme por haberme negado a que usted y mi difunta hija se casaran, si hubiera aceptado mi hija continuaría en estos momentos viva, por ello le pido perdón” a lo que yo respondí- “no tiene porque pedirme perdón señor Di’ banco, usted no es el culpable de su muerte, usted creyó que no casándose con migo seria mejor para su futuro, venga anímese, debe recordarla en los momentos alegres que paso con ella, su infancia, cuando jugaba con ella...” Ni siquiera mis palabras pudieron consolarle. Antes de irme me hizo una pregunta extraña- “señor Malieri, ¿usted la seguía queriendo aunque estuviera casada?” a lo que yo respondí- “ si señor di’ banco, la quise hasta el ultimo de sus días y aun la sigo queriendo aunque no este entre nosotros” entonces dijo- “pues entonces e de entregarle lo ultimo que me queda de ella, pásese mañana y lo recibirá”. Me marche de allí con una intriga muy grande, pensando en que podía ser eso que el señor Di’ banco me quería dar y sobretodo tras decirme que era l0o ultimo que el tenia de su hija, ¿Qué podía ser aquello?

A la mañana siguiente fui hacia el despacho del señor Di’ banco como el me dijo, cuando entre al despacho vi al señor Di’ banco sentado sobre su preciosa silla de cuero negro, de espaldas a su mesa de roble y a la puerta.
Con voz tenue pregunte- “da su permiso para entrar señor Di’ banco” y entre sollozos y con voz triste respondió- “adelante Tobías adelante”. En ese momento me quede extrañado, era la primera vez que el señor Di’ banco me llamaba por mi nombre. Me acerque hacia la mesa, el se dio la vuelta, entre las lagrimas que brotaban de sus ojos se podía ver el sufrimiento por la muerte de su hija.
Entonces el me dijo- “E aquí lo ultimo que me queda de mi hija, lo que pude arrebatarle a ese mal nacido el mismo día que mato a mi hija. Tómelos Tobías por que si mi intuición no me falla ellos son mas suyos que míos.” Ante mi expectante mirada el me entrego en un pequeño cestillo a dos pequeños bebes, me entrego a mis dos hijos.
Recibí a una pequeña niña a la que llame como su madre y a un fuerte niño al que llame Bartolomé. Ese día fue el día más feliz de mi vida. Años mas tarde, enferme y e llevado mi enfermedad durante muchos años pero ya no puedo seguir durante mucho mas tiempo, os e contado todo esto para que toméis empeño en vuestra vida, para que los males del amor no os afecten, para que podáis recordar alguna lección que hayáis encontrado en mi historia, para que en un futuro seáis mejores que vuestro padre y si la suerte no os acompaña no os preocupéis, por que vuestra madre y yo os estaremos vigilando y cuidando desde el cielo, ahora hijos míos seguid vuestra vida y no os preocupéis por el futuro mas próximo, Mamadú se encargara de vuestra educación, ya le e dejado dinero suficiente como para que recibáis un educación digna y no tengáis que estar trabajando desde muy pequeños, ahora dejadme a solas con Mamadú e de decirle una cosa.
Mamadú has sido mi amigo durante mucho tiempo y ahora te dejo a cargo de mis hijos, Mº luisa ya es casi una mujer y Bartolomé es fuerte pero no quiero que se lance a la vida, quiero que estudie y sea una persona de bien, a y no te olvides de Dogos, al pobre tampoco le queda mucho, gracias por todo, eres una persona maravillosa, lastima que esta sociedad no os trate de manera mejor a ti y a todos los de tu raza. Ahora déjame solo, quiero descansar.”
-“Como quieras amigo mío, el medico a dicho que es lo mejor que puedes hacer, hasta luego Tobías, Tobías… Tobías…. O Tobías, pobre, no has podido aguantar mas, pero al menos lo suficiente como para contar tu vida a tus hijos y que puedan aprender de ya, descansa tranquilo amigo mío yo cuidare de ellos, descansa en paz amigo mío, descansa en paz”
- “Mamadú ¿Cómo esta mi padre? –“Descansando Bartolomé, descansando en paz, ve a decírselo a tu hermana, e de llamar al doctor para que lo confirme”
- “De acuerdo Mamadú, gracias por todo”
- “Aquí termina la vida de Tobías Malieri un hombre al que la vida no le trato con justicia y que al final encontró la paz que durante toda su vida busco. Yo Mamadu, amigo fiel de el señor Malieri doy fe de ello”.

lunes, 27 de agosto de 2012

Recuerdos de una vida 1º Fragmento

Tiempo atrás mi vida no fue mucho mas tranquila que en estos momentos tan nefastos que invaden mis alrededores.
Recuerdo cuando jugueteaba revolcándome en la hierba del jardín de la vecina, recuerdo aquel tacto que sentía al tumbarme sobre ella, era suave, húmeda, cómoda, sedosa era como reposar sobre una gran cama echa de suave y blanda seda, era perfecta, podrías caerte, revolcarte, o tirarte que no te harías daño.
También recuerdo la dulce, tierna y cálida voz de mi madre llamándome-
Tobías hijo, ven corre, despídete de la vecina y lávate las manos que papa llegara pronto y nos iremos a nuestra nueva casa”.
Oh, si la recuerdo muy bien llamándome desde aquella pequeña ventana que permitía que los rayos del astro rey iluminaran la cocina de nuestra casita.
Ese día la dejamos para irnos a lo que mi padre decía que seria una casa mejor, años mas tarde volvería, tras la muerte de mi madre, una enfermedad hizo que se la llevara en tan solo unos meses.
Mi padre abrumado por la muerte de mi madre decidió que volviéramos a nuestra antigua casa, decía que allí se sentiría mas cercano a ella, ya que habían pasado la mayor parte de sus vidas allí, me mintió.
Tan solo un mes después de mudarnos de nuevo a nuestra casa, mientras estaba en el colegio, no pudo soportar la falta de mi madre, aquella persona que le había echo tan feliz durante tantos años, cogió un cuchillo y se atravesó el corazón dejando una carta, en la cual decía todo lo que me quería y que lamentaba mucho que tuviera que afrontar solo las duras clases de la vida, hay comenzaron los problemas que debería afrontar solo y sin ayuda de nadie.

Desde temprana edad me puse a trabajar en una mina que regentaba un amigo cercano de mi padre, trabajaba como minero en las galerías demasiado pequeñas para que un hombre adulto entrara a trabes de ellas. Por el día trabajaba y por las noches me sacaba los estudios básicos, para al menos poder en un futuro encontrar un trabajo mejor. Dos meses después el propietario de la mina murió y esta se cerró, yo me quede sin trabajo y pronto me quedaría sin casa, ya que el sueldo de la mina no llegaba para cubrir los gastos mínimos de la casa. Con solo doce años me vi mendigando por las calle y sin un lugar donde caerme muerto; pero entonces un ángel en forma de mujer de una edad avanzada me salvo de morir de frió y de hambre, aquella agradable vecina que me dejaba tumbarme en la hierba de su jardín me recogió, y me cuido y crió con cariño y ternura.
Unos años mas tarde, cuando yo tenia dieciocho años ya cercano a los diecinueve, esa dulce anciana que me crió como a su propio hijo, dándome cualquier capricho que quisiera, cuidándome y dándome una educación digna de una persona, muere en una fría noche de invierno debido a su vejez y a una enfermedad, la cual no consigo recordar. Ese día aprendí una nueva lección la cual aun respeto y conservo en mi memoria.
Para mi sorpresa la dulce anciana había dejado un heredero a todas sus pertenencias, me había nombrado su heredero. En el momento que vi su cuerpo tomar reposo en el cementerio una extraña mezcla de alegría y pena me inundo el corazón, y este se estremeció haciendo que lagrimas de esa extraña mezcla brotaran a través de mis ojos, como si de una fuente de emociones, sentimientos, y recuerdos se tratara. Esa sensación amarga y dulce al mismo tiempo me removía todas mis entrañas, mientras mis lágrimas descendían por mis mejillas.
La pena era por que sentía lo mismo que cuando se murió mi verdadera madre y así sentí lo que ninguna persona a sentido, el perder a una madre dos veces, por que para mi ella era como mi segunda madre, la alegría era por que sabia que iría directa al cielo pues ella se lo había ganado a pulso, simplemente con el echo de adoptarme como su hijo, criarme, educarme, quererme y encima nombrarme su heredero para que no pasara ninguna penuria, solo por eso ya se merecía el cielo, porque como dije antes ella era una ángel en forma de mujer.

Años más tarde, después de deambular por pequeños trabajos que no me llevaban a ninguna parte (carpintero, transportista, cochero…) conseguí un trabajo como escritor de cartas en una naviera.
Mi trabajo era sencillo, escribir las cartas que mi superior me dijera para enviarlas y que los barcos supieran como debían tratar la mercancía que llevaban.
Entonces cuando mi vida comenzaba de nuevo a tomar un rumbo adecuado dio un vuelco enorme y empecé a sentir una sensación que jamás había sentido, fue cuando el gerente de la naviera me presento por casualidad a su hija, la bellísima Mº Luisa Di’ banco, su hermosura era impresionante, sus cabellos dorados como si estuvieran hechos de oro, su cuerpo sensual y perfecto incitaba a cualquier hombre a quererla, sus labios carnosos adornados con un precioso carmín rojo y sobretodo sus ojos verdes, que brillaban como dos hermosísimas esmeraldas. Ella se acerco hacia mi y me pregunto mi nombre, yo le respondí- “mi nombre señorita es Tobías Malieri, para servirla a vos y a su padre”. Ella con una voz muy suave y educada me respondió- “gracias señor Malieri el placer de conocerle mío” a lo que yo respondí- “Dispense señorita pero debo decirle que el placer es mío por conocer a una dama tan bella como vos”.

Esa noche no pude dormir, solamente el pensar en ella hacia que mi corazón se moviera cada vez mas deprisa y un cosquilleo me recorría el estomago, en estos momentos desearía que mi padre estuviera para que me aconsejara y me dijera que era lo que debía hacer.
Poco a poco ella y yo fuimos estrechando lazos, primero con salidas formales de empresa, luego con acompañamientos a distintas tiendas de ropa, paseos por la bahía, invitaciones a pequeñas meriendas en compañía do otros amigos y al final ella y yo nos terminamos enamorando, mi amor se lo confesé mientras paseábamos un día por la bahía, ella me miro con una cara tímida y me respondió favorable diciendo que ella sentía lo mismo por mi. A las pocas semanas fuimos a decírselo a su padre pero antes de que pudiera mencionar palabra alguna el me rechazo, decía que no era lo suficiente bueno para ella y que además ella estaba comprometida a casarse con otro hombre, en ese momento mi corazón se partió en dos y el de ella también, su padre la había comprometido con un mercader musulmán que se había encaprichado de ella. Decía que seria mucho mas feliz con el mercader que con migo, por fortuna el me siguió tratando bien y no me desprecio ni despidió, pero mi amor por ella era inmenso y tenia que verla fuera como fuera, decidimos vernos a escondidas varias noches, pero ella estaba demasiado vigilada, al mes ella y el mercader se casaron en un bonito día de primavera, a la boda se invitaron muchos personajes aristocráticos importantes y algunos generales militares, el gerente de la naviera por supuesto fue invitado y yo también fui invitado a dicho enlace, cuando vi tanta gente importante allí me di cuenta de que me había equivocado sobre el, pregunte a uno de los invitados y lo que yo creía que era un simple mercader resulto ser un comerciante muy importante que comerciaba con armas, alimentos, madera, metales y demás suministros muy necesarios, estos eran exportados por todas partes del país y también a parte del extranjero, principalmente los metales. Ella en lo que debería ser el día mas feliz de su vida estaba triste y yo sabia por que, en un momento dado me di cuenta de que ella seria mucho mas feliz con el que con migo, aunque ella no lo quisiera. Yo no le podía dar nada y el podía dárselo todo, así que tome la dura y difícil decisión de olvidarla y dejar que ella continuara su vida sin mi. En el momento que ella me miro y yo me di la vuelta para marcharme una nube de tristeza lleno mi corazón............

lunes, 6 de agosto de 2012

Miradas

Mírate, mírame
Tan cerca y tan lejos
Como pasan los años,
Como pasa el tiempo
Como tu mirada triste
Refleja los años olvidados
Y una vida de recuerdos
A mi lado.
Podrá salir el sol,
Podrán llorar las nubes,
Pero lo que no podrá pasar,
Es que tu belleza se borrase,
Como una ola se funde en el mar,
Sólo con tu ausencia, tu silencio
Tu mirada sombría
Y mi desaliento.

Por: Carlainne

miércoles, 18 de julio de 2012

Perdoname


Quiero pedirte disculpas, soy idiota
Te he echo daño sin darme cuenta,
He volado libre sobre el mar cual gaviota,
Haciendo que mi corazón no sienta.

Te he dejado en tierra,
He sido descuidado con lo que mas amo,
Me he comportado como el que entierra,
Su corazón bajo un leño quemado.

Aun te amo y por ti estoy despierto,
Mi sueño no será conciliado,
Si ahora lo que siento,
Es que mi corazón se ha suicidado.

Y con él se ha llevado al que amaba,
El que escuchaba y me comprendía,
Un corazón que latía donde yo estaba,
Uno de esos, que no se encuentra hoy en día.

No quiero volver a perderte,
Sabíamos que esto sería muy complicado,
Perdóname y déjame quererte,
Dejame verte, y estar a tu lado.

Por: Carlainne

viernes, 13 de julio de 2012

Soñarodes


Donde están los soñadores,
Aquellos que cerraban los ojos,
Y veían la vida llena de colores,
En tonos de azules, verdes y rojos.

Los que nos hundíamos en el lodo,
los que nunca tenemos suerte,
Aquellos que nos reíamos de todo,
Que nos reíamos hasta de la muerte.

Quiero volver a encontrarlos,
Forjar a su lado mi camino,
Beber con ellos hasta emborracharnos,
Alzar a su lado mi copa de vino.

Ellos son mis versos perdidos,
Los que siempre estarán conmigo,
Las canciones que ahuyentan al olvido,
Son mis hermanos, mis amores, mis amigos.

Quiero


Quiero despedirme,
Decirle adiós a todo,
Reinventare, reescribirme,
Empezar a pensar de otro modo.

Ser como es un buen verso,
Frágil y a la vez seguro,
Cargado de lagrimas y besos,
Ser como todos, pero como ninguno.

Quiero ser el verso prohibido,
Aquel que solo fue escuchado,
Por los curiosos oídos,
De un amor pasado.

Quiero renacer,
Ser un ser totalmente nuevo,
Volver a soñar y creer,
En la gente y en el Dios verdadero.

martes, 10 de julio de 2012

Nada


Apártate de mi vista,
Desaparece, ya no te quiero,
Creíste ser la mejor, la mas lista,
Vete ya, falso amor verdadero.

Fingiste quereme,
Jugaste con todo lo que era,
Te arrepentirás de perderme,
Ya no tendrás quien te quiera.

Serás humo de brasas mojadas,
Ánima en el bosque eterno,
Esos serás para mi, nada,
Ya no sentiré tu aroma en el viento.

Vivirás mirando tu estrella,
Es que con su brillo te despierta,
Pasarás las noches en vela,
Esperando una respuesta.

Por: Carlainne

viernes, 22 de junio de 2012

Cielo Soñado

La luna de mis noches se ha marchado,
Su luz, desaparece de mi cielo.
Mis ojos quedan oscuros, apagados.
Y mi interior con aquel anhelo.

En algún lugar la encontraré,
Algún día daré con ella,
Una luna nueva, que me ilumine
Que merezca morir por ella.

Ya empiezo a echarte de menos,
Jamás podrán reemplazarte,
El amor que por ti aun siento,
Siempre será imborrable,

Espero que donde estés,
Aun me sigas queriendo,
Que aunque no me ves,
Mi corazón te esta sintiendo.

Te sentirá mientras que viva,
Jamás te dará de lado,
Nos veremos en la otra vida,
Dentro de nuestro cielo soñado.

Por: Carlainne

jueves, 7 de junio de 2012

Bella Cartagena

Y yo también poco a poco,
Llegue a aquel puerto,
Al cual los de Cartago dieron nombre,
Y comprobé con mis propios ojos,
Que lo que Cervantes escribió era cierto,
Que ese mar que su puerto baña,
Es el mar más bello,
De todos los que ha navegado el hombre

Comprobé que aquel gigante azul,
Respiraba al igual que yo,
Que el viento del levante lo movía,
Y que las gentes que de el vivían,
Eran gentes como un servidor,
Orgullosas de su puerto y ciudad,
Enamorados de esta patria mía,
Y por este milenario y mágico lugar.


También comprobé que en ella el tiempo era eterno, 
Y en sus mil muros y mil rincones,
Se puede contemplar como antes era,
Puesto que es un espejo de tiempo pasado,
Del tiempo en el que se creía en el infierno,
De un tiempo casi olvidado por los menores,
Pero que sus calles dejaron huellas,
Huellas que recuerdan como era Cartagena.


Bella y preciosa Cartagena,
Por ti alzo mi copa al cielo,
Por ti y por tus rincones del tiempo,
Por ti y por tu azulado puerto,
En el cual vivir quiero,
Hasta que ya marchito mi cuerpo,
Se convierta en polvo cartagenero,
Y lo alce a los cielos, un levantino viento.




Por: Carlainne

martes, 5 de junio de 2012

Por ti

Hoy he despertado con tu olor en mi cama,
Con el aroma de tu piel, de tu pelo,
Una esencia que yacía olvidada,
Y que en palabras significa te quiero.
He tenido suerte al encontrarla,
La guardaré con esmero.

Suena raro todo esto,
Hace dos días estaba llorando,
Y hoy, es distinto todo lo que siento,
Supongo que estaré cambiando,
Que será por lo nuestro,
Incluso me estoy emocionando.

Parezco bobo ahora mismo,
Sentado pensando en ti y llorando,
No estoy acostumbrado, es distinto.
Estoy acostumbrado a ir vagando,
A perderme en un oscuro abismo,
O pensar mientras las horas van pasando.

Se me hace raro sentir esta presión en el pecho,
Este calor interno y tranquilizador,
He ignorado muchas de las cosas que he echo,
Pero jamas me olvidaré este calor,
Un calor que clienta mi cuerpo y mi lecho,
Y quema cualquier rastro de dolor.

Espero tenerte siempre a mi lado,
Por ti vuelvo a estar soñando,
Vuelvo a sentir el corazón emocionado,
A cada segundo que pasando,
Cada verso que dejo aquí plasmado,
Son los besos, que desde el papel te mando.

Por: Carlainne

sábado, 2 de junio de 2012

Tu me pediste.

Tu me pediste que te dejara despertar cada día a mi lado, que te dejara soñar que nunca te abandonaría al desamparo. Me pediste que no me fuera jamas, y que detuviera el tiempo en el instante justo en el que tu yo estemos juntos, que aquello fuera eterno y pudieras volar sobre el cielo, ya que el único apoyo que necesitas es mi amor acariciándote en cada segundo. por que solo de esa manera podrías completar la parte que por defecto estaba desecha. Tu me pediste que te enseñara a confiar de nuevo, que te demostrara que no existe el miedo, que todo el dolor no fue en vano y que por fin entraste un regazo donde recostarte cada noche al caer la madrugada. me pediste que bailásemos junto a las estrellas en la negrura de la noche, sin importarte que dice o hace el caprichoso destino. Me pediste que juntos burlásemos la mirada del dios que siglos atrás castigó al amor. y me afirmaste que, que mas da que estemos lejos, que lo importante es que nos queremos y que va a ser así por mucho tiempo.

Tras estas peticiones mi alma se ahogó en un mar de lagrimas. Pero no lágrimas de tristeza o melancolía, lágrimas de felicidad por haberte encontrado, por encontrar a una persona tan maravillosa como tu.

Pues yo no te pido nada, yo te prometo.

Prometo hacerte despertar cada día con una sonrisa nueva e intentar que sea a mi lado. Haré que dejes de soñar en el desamparo, por que jamás volverás a saber de él. No puedo prometerte que jamas me iré por que nuestros cuerpos se echarán a perder, pero mi alba caminará tu lado hasta que tu lo decidas. El tiempo no puedo deternerlo, pero si prometo estar a tu lado todo lo que el tiempo me permita, para hacer ese momento constante y eterno. Y que sepas que mi amor, camina a tu lado, acaricia tu piel y vela por ti desde el primer momento que te vio. Prometo hacer que confíes en mi y en el amor. Que confíes ciegamente en mis palabras, pues solo así podrás encontrar el verdadero camino que conduce hasta la unión de nuestros corazones. El miedo desaparecerá solo, no tienes por que preocuparte por el, y a mi lado no volverás a sentir dolor, pues yo lo sentiré por ti. Cada noche podrás abrazarme y descasar sobre mi regazo, para que no te sientas sola, para calmar esos miedos que te aturden. No bailaremos junto a las estrellas, ellas bailarán para nosotros. Haré que cada noche el cielo forme un nuevo conjunto para que cada noche sea única y especial. Juntos burlaremos la mirada de ese Dios, el dios que defiende la soledad y masacra al amor.

Prometo estar a tu lado, no abandonate nunca. Lucharé por que estemos juntos, no me importa lo lejos que estemos, no existen distancias para una unión como la nuestra. Te quiero pequeña, te quiero mucho. Daré todo lo que esté en mi mano para que esto salga bien.


Por: Carlainne

miércoles, 30 de mayo de 2012

Poeta

Joven creador de dulces palabras
Que con pluma en el papel,
Las obras más bellas plasmas,
Con el suave tacto de un clavel.

Delicados versos duraderos
Que por cálidas manos pasaron,
Anduvieron por mil senderos,
Y cientos de personas escucharon.

Predicador, de bellos textos,
Orador, de verso que dan calma,
Creador, de poemas sinceros,
Autor, de obras para el alma.

Poeta de la blanca luna,
Con dulces y cálidos versos,
Duermes a tu niño en su cuna,
Que queda en sus sueños inmerso.

Amante de la escritura,
Vidente de la realidad,
Escritor de alma pura,
Protector de la bondad.

Por: Carlainne

lunes, 28 de mayo de 2012

Herida cerrada

Rugen las nubes heridas por tu recuerdo,
Los rayos, atizan a la tierra agonizante,
Su sangre se derrama por el suelo,
Y se mezcla con el mar errante.

Mi sangre se acelera por mis venas,
Busca un vía de escape cercana,
Una abertura que la deje salir fuera,
Que deje fluir la sangre condenada.

Sangre ennegrecida por tu veneno,
Ardiente por el deseo de olvidarte,
Me quema igual que fuego al centeno,
Y me ordena que empiece a odiarte.

A mi corazón a empezado a convencerlo,
Hace que sienta un deseo extraño,
Empiezo ha asimilarlo, a querer hacerlo,
El calor de la sangre me hace mucho daño.

Mi sangre me ha convencido,
Quiero odiarte, ver como sufres y te desesperas,
Ver tu corazón herido y corrompido,
Hacerte sufrir de mil maneras.

Quiero ver brillar tus ojos de zafiro,
Sentir sus latidos junto a los míos,
Pronto sentirás lo que he vivido,
Lo que uno siente en los días fríos.

Y cuando te tenga acorralada,
Cuando no tengas ninguna salida,
Entonces observaré tu mirada,
Y cerraré al fin esta infectada herida.


Por: Carlainne

domingo, 27 de mayo de 2012

Siempre te recordaré

No esperaba esto.
Jamás pensé en que tu me faltaras,
Repaso cada minuto y pienso,
Pero no se decir nada.

Me duele haberte perdido,
ayer estabas tan alegre,
Hablando y riéndote conmigo,
y hoy se que no volveré a verte.

Hacia años que lo pedías,
Pedías morir y no sufrir mas,
Y hoy se ha cumplido lo que querías,
ya no volverás a despertar.

Atrás dejas gente que te quiere,
gente que siempre te a amado,
Saber que no volverás me duele,
me duele no volver estar a tu lado.

Mis lagrimas no sirven de nada,
No harán que vuelvas conmigo,
Siempre te llevaré en mi alma,
Por que mas que mi tío, tu fuiste mi amigo.

En memoria de mi tío Francisco García Gil. Fallecido hoy, día 27/5/2012.
Siempre te recordaré tito.

Por: Carlainne

Nos hemos vuelto a encontrar

Hoy el amor ha llamado a mi puerta,
Olvidé que habíamos quedado,
Me vestí rápido con lo que encontraba,
Vestido, cogí mi cartera y la chaqueta,
Pedí perdón por haberle olvidado,
y sonreí tímido mientras me perdonaba.

Hacía mucho que no le veía,
Lo noté muy cambiado,
Era diferente a como no recordaba.
Ahora no lloraba, sonreía,
No estaba roto o desolado,
No era una rosa negra olvidada.

Paramos en un bar y tomamos café,
Hablamos sobre nuestros pasados,
Y sonreíamos felices por encontrarnos.
Hablamos sobre cosas que que olvidé,
Cosas como, los corazones apasionados,
Sobre recuerdos que un día fueron amargos

Nos cogimos las manos y paseamos,
Andamos juntos por aquella calle,
No me decía nada, no era necesario.
Aquellos segundos ya no eran nublados,
No existía la tristeza, ni un oscuro valle,
Simplemente era, extraordinario.

Yo ya estoy en mi casa solo,
Con la sonrisa por haberle encontrado,
por haber sentido su compañía.
El por que ha llegado ahora lo ignoro,
Pero esto era algo ya anunciado,
Por que sabía, que pronto volvería.

Por: Carlainne

viernes, 25 de mayo de 2012

Primavera marchita

Flor perenne que dormías, despierta,
Vive la primavera que aun conservas,
Pues el gélido invierno ya esta cerca,
Y marchitara los pétalos que aun tengas.

Se feliz, sueña, canta y vive,
Esos pétalos que aun tienes ya están cayendo,
Goza, disfruta, baila y ríe,
Que tu tiempo dorado ya se esta yendo.

Tu mirada cálida desaparecerá,
Tu voz dulce se volverá áspera y rota,
Tus suaves y blancas manos se arrugaran,
Vive, y disfruta ahora, que es cuando toca.

La piel de seda blanca que tienes,
Se agrietara y poco a poco ira muriendo,
El calor que en tu interior sentías,
Pronto, acabará desapareciendo.

Por: Carlainne

martes, 22 de mayo de 2012

Maldita Hiedra

Una vez más he pensado en ti,
En tus ojos, tu rostro, que raro.
Estoy cansado de ser así,
De todo lo que me ha pasado,
De verte en cualquier lugar,
En sueños, en mis versos olvidados,
Estoy arto y quiero cambiar,
Quiero cambiar este estado.
Dejar de ser sombra en la noche eterna,
Para ser luz en el día nuevo,
Quiero dejarte atrás, maldita hiedra.
Quiero que se avive mi fuego,
Ver quitar todas estas piedras,
Demolerlas, quitarlas de mi camino,
Dejar de ver como poco a poco enhebras,
Con tus negros hilos, mi destino.
Quiero quemar todo lo que he sido,
Para poder ser polvo en el viento,
Porque durante años he fingido,
He jugado con todo, y ahora no te miento,
Intentando vivir una vida que jamás he querido.
He vivido como si esto fuera para otro,
He jugado a ser el amo y señor de todo,
Cuando solamente soy un corazón roto,
Hundido en un profundo mar de lodo.
Y tu eres la única culpable de todo,
Eres la mayor de mis agonías,
Por tu culpa. Por la mía,
Por creer en tus palabras vacías,
Por que fui el títere de tus deseos,
Aquel que hacía lo que le pedías,
A cambio de unos breves paseos,
Y promesas que no merecía.
Maldita seas siempre,
Maldito sea tu recuerdo y tu sigilo,
Con el que poco a poco te acercabas,
El mismo con el que entraste en mí,
En mi alma herrante, en mi corazón,
Para dejarlo mortalmente herido.
Cuantas noches habré llorado por ti,
Cuantas lagrimas derramadas.
Destrozaste mi ser sin compasión,
Fuiste veneno en mis venas,
Dolor marcado a vivo fuego,
Pronto purgaré mi alma de tu recuerdo,
Terminaré al fin este infernal fuego,
Cortaré los negros hilos de tus telas,
Con las que tapabas mis ojos,
Y envolvías los despojos,
Que me quitaste, con esta condena.

Boda de luto

La niña cantaba,
Mientras su madre le prepara el velo,
Que al flamante vestido acompaña,
Con ligeros tonos de azul cielo.

Suenan campanas nupciales,
Lagrimas en los ojos, gente en movimiento,
Se escuchan palabras que suenan especiales,
La niña sabe, que ha llegado su momento.

La niña espera a su amado,
Ella sola impaciente le espera,
La cumbre de su amor ha llegado,
Espera al hombre que la quiera,

La niña espera sola y lo niega,
Espera sola a su amado,
Pero el nunca llega,
Le está esperando en vano.

La niña mancha su vestido,
Sus lágrimas caen desesperadas,
El amante marchito se ha ido,
Dejándola en el altar abandonada.

La niña abre sus ojos negros,
Y recuerda lo que ha pasado,
Recuerda todo aquel infierno,
Que pasó a su lado.

Él no pudo cumplir su promesa,
Prometió que antes del fin se casarían,
Pero su enfermedad le pesa,
Y la dejó sola en aquel gran día.

domingo, 20 de mayo de 2012

Esos locos bajitos.

Son figuras inocentes, alegres,
Son pequeños rayos de luz dorada,
Iluminan las blancas paredes,
Tan solo con la risa y la mirada.

Caminan torpes por los hogares,
Con pequeños pasos alocados,
Descubriendo mil lugares,
Para ellos ocultados.

Cogen todo lo que llegan a tocar,
Empinándose en su diminutos pies,
Para poderlos alcanzar,
Y desvelar al fin el ¿Qué es?

Corren despreocupados y ajenos,
Ajenos a todo lo malo,
Son los que al crecer echamos de menos,
Aun sabiendo que no te han olvidado.

Pequeños infantes risueños,
Alegres por naturaleza,
Descansa inmersos en los sueños,
Que hay en sus locas cabezas.

Son los que duermen sin rezar oración
Son nuestros hijos queridos,
Y como dijo Serrat en su bella cancion,
Son, esos locos bajitos.

Por: Carlainne

jueves, 17 de mayo de 2012

Carta de despedida.

Una inmensa amargura,
Expresa con tristes palabras,
Una dulce y angelical figura,
Oculta entre recientes cartas.

La noche cobija el recuerdo,
La luz del candil ilumina el ayer,
Viendo carta escritas en verso,
Sentimientos y emociones hechos en papel.

Observando la luna presente,
Plasmando en ella su mirada,
Llenando de esperanza su mente,
Que de ella estaba necesitada.

Lagrimas caen en los tristes versos,
Escritos por el caballero amado,
Ella ve sus recuerdos inmersos,
En un poema que había olvidado.

Espera el ansiado regreso,
De la dulce y clara felicidad,
Guardando la carta escrita en verso,
Aunque sabe que no volverá.

Por: Carlainne


miércoles, 16 de mayo de 2012

Ayer perdí

Ayer perdí a una vieja amiga,
Era la madre de los rebeldes de mente,
La madre de aquellos que aman la vida,
Y que la viven de forma diferente.

Perdí al verso que fue prohibido,
El sueño echo carne,
La luz que ilumina el olvido,
La que vivía sin tener sangre.

Ayer murió el grito silenciado,
La voz de los que son diferentes,
Sus latidos se fueron apagando,
Y su cuerpo, quedando inerte.

Hoy al lloran los niños y los pobres,
La lloran los que gritaron a su lado,
Mandarán sus deseos metidos en sobres,
Los que con su silencio fueron sellados.

Ayer murió mi libertad, la libertad de todos,
De los justos y los desamparados,
Entre negras rosas caen sus lloros,
Entre las rosas, que juntos plantamos.

Por: Carlainne